miércoles, 28 de diciembre de 2016

Capítulo 33: Capítulo 78 (conteo general):“Fiesta a medianoche”.

Los chicos sin duda me estaban tomando el pelo. Y yo iba a seguir su juego.
—Oh, pues no hay problema—dije con acento mejicanizado—Rocky es el adulto de esta operación. —Miré a Rocky. No se esperaba eso de mi parte—. ¡Tú eres el padre y Riker y yo somos tus hijos! —dije abrazando a Riker y pegando su cachete al mío… Soy toda una niña.
—Entonces tú y yo somos hermanos, ¿no?
—Igual tú ya eres mi cuñao, my brother-in-law—comenté riendo a carcajadas y apapachando a Riker.
Rocky negó escéptico—como todo un adulto—y procedió a buscar dos piedras para colocar la caja de explosivos.
— ¡Yo quiero encenderlo! —Salté hacia donde estaba Rocky “el adulto” con un fósforo en la mano.
Rocky me cedió los fósforos. Los tomé y encendí una cerilla. Lo acerqué a la mecha y…
— ¡Ouch! —Rocky se quejó de dolor por haberse quemado el dedo.
La mecha prendió y nos alejamos. Pero no nos dio tiempo para alejarnos lo suficiente. Aunque a salvo ya donde estaba Riker, mi corazón no se desaceleraba porque el susto pasado.
— ¡Qué adulto, Rocky!—criticó Riker cuando llegamos donde él.
Un poco más lejos de nosotros estaba mi padre, escrutando la operación ‘lanzar cohetes’ desde el portal de la casa.
He is a truly adult. —dijo Riker señalando a mi padre—. Not like you.
Rocky saludó a mi papá con un gesto de la mano y este respondió con un gesto de la cabeza. Mientras los fuegos artificiales iban siendo disparados e iluminaban el cielo de medianoche. El nuestro era de los últimos espectáculos pirotécnicos. Yo lo dije: estábamos tarde.
Se acabaron los 24 disparos y se dieron por concluidos los fuegos artificiales de Navidad en el barrio. Creo que al final quedé contenta. Al igual que Riker, mi brother-in-law.
Íbamos a entrar a casa cuando se nos ocurrió—a Riker y a mí—voltear a ver la calle en perspectiva. Casi al fondo, a la altura del parque todavía se veía esa gran bola de fuego. ¿Sería un muñeco? Pero los muñecos se hacen para año Nuevo, no para Navidad. Pero igual entramos en casa. Rocky y Riker iban conversando.
— ¿Así que ustedes estaban en el cuarto mientras los padres de _____ (TN) se emborrachaban con el vino y el ron?—preguntó Riker en inglés, por suerte para él. Porque si mi madre le hubiera oído le daría un buen escobazo o una chancletada.
—sí… —Rocky respondió dudoso.
— ¿Y qué hacían en el cuarto?—preguntó Riker con un tono picaroso—. ¿Acaso estaban discutiendo?
—No, claro que no, Riker—me metí en la conversación. Ya estábamos en medio del vestíbulo—. Nuestra relación va más que bien—dije, colocándome al lado de Rocky y pasándole un brazo por la cintura.
— ¿Seguros? —Riker escrutó nuestros rostros.
—Sí—dijimos Rocky y yo al unísono.
—Oh, no mientan ya, chicos—rio Riker—. Estaban teniendo relaciones—soltó Riker.
Rocky ha reído como nunca en su vida. Su risa se fue convierto en un quejido agudo que se me clavó en el pecho con un cuchillo. ¿Qué le daba tanta risa? ¿Los hechos que realmente ocurrieron? ¿La pregunta y suposición de Riker? ¿El hecho de que en realidad su intención era hacer de esta Nochebuena aún más buena para nosotros y que no lo consiguió?
—Riker, hermano… —Rocky le colocó una mano en un hombro y luego la otra en el otro—______ (TN) se está reservando para el matrimonio. —Sonrió al decir aquello y me miró dulcemente mientras me abrazaba por la cintura. Yo sonreí y seguí sonriendo para mostrarle a  Riker que todo estaba bien—Solo estábamos pasando un momento a solas. Ya sabes, preparándonos para la Gran Noche.
No pude dejar de advertir el guiño que Rocky le lanzó a Riker. Estos dos estaban tramando algo, porque si no, no hablarían tan poco claro.
¿Qué Gran Noche es esa? ¿A caso Riker y Rocky estaban planeando juntos la noche en la que Rocky y yo nos acostaríamos por primera vez? Qué locura. ¿Quién sería tan desquiciado como para planearlo todo tan fríamente?


*          *         *


Narra Rocky:
______ (TN) estaba en su cuarto durmiendo todavía. Ella se acostó más tarde que yo. Riker y yo nos la llevamos para nuestra casa en cuanto sus padres bajaron la guardia. Fue como un secuestro.
Ella había bebido suficiente alcohol como para no estar consciente ni de quien la acompañaba. ¡Y yo no bebí más de dos copas!
Había una pequeña fiesta en mi casa. Una fiesta de víspera de Navidad. Sí, una pequeña fiesta. No había alcohol, pero sí mucha comida azucarada; era una fiesta de niños.
­­­______ (TN) y yo subimos al segundo piso y en el cuarto de Rydel tomamos el té. Su risa parecía que estaba más sobria que ebria. ¡Pero estaba ebria; su conducta lo decía!
Salimos del cuarto de Rydel y fuimos al de Ross. Ahí estaban Ana, Ross y Ryland jugando Nintendo, como niños pequeños. Estuvimos un rato ahí jugando; haciendo loqueras y locuras.
_______ (TN) le escupió a Riker por el pasillo que va hacia mi cuarto. Y él, muy enojado la agarró de los hombros y la sacudió como un trapo. En ese momento entré a defenderla.
— ¡Riker! Riker, please. She’s drunk. Let me solve this—le dije.
Riker se negó al principio, pero luego tuvo que permitirme llevármela. Para ese momento no era más que un bulto de carne. _____ (TN) se había desmayado en medio pasillo y yo tuve que cargar con ella hasta mi habitación.
La acosté en mi cama y luego cerré la puerta. Afuera había un barullo molesto. Pero dentro de mi cuarto todo era tranquilo. La cama estaba en el lugar más apropiado de toda la habitación: en el centro, pegada a la pared del fondo entrando por la puerta. Estaba a oscuras la habitación, porque las cortinas, de terciopelo rojo, estaba cerradas y no permitían que ni la luz de la luna llena se colaba.
La brisa entraba por una rendija entre el marco de la ventana y el concreto; movía las pesadas cortinas y llegaba hasta el centro de la habitación, haciendo bailar los cabellos castaños de _____ (TN). Su nariz perfilada adornaba perfectamente su cara.
Le acaricié una mejilla y luego dejé que mi mano gozara de sentir el tacto con su piel. Luego la volvía a acariciar. Tuve la impresión de que una tímida sonrisa aparecía en sus labios. Acerqué mi cara a la suya, arrodillado en la cama, y agarré su mentón con mi pulgar y mi dedo índice de la mano derecha. Hundí el rostro con los labios en posición de beso y dejé que cayeran suave y delicadamente sobre los suyos.
Sus labios estaban húmedos y rechinaron en cuanto nos separamos. La miré fijamente desde arriba. No despertaba. Descargué sobre ella otro beso, esta vez con lengua. Con mi mano separé sus labios y puede entrar en su boca. Su inactividad me desanimó. Me separé de ella y me hice a un lado. Ya me sentía cansado. Era mejor si descansaba.


*          *         *


Mientras yo dormía sonó el teléfono de ____ (TN). Entreabrí los párpados con pereza. Pero los sentí tan pesados que no pude mantenerlos abiertos y la luz del teléfono de ____ (TN) me cegó. Ella la estaba despierta, pero no estoy seguro de que estuviera sobria de nuevo.
La puerta se abrió y una terrible jaqueca me entro al colarse todo el ruido de la fiesta de afuera y la luz blanca del pasillo. Oí unos pasos decididos; pero poco a poco fueron disminuyendo. Se acercaron a la cama y la persona que los producía posó sus manos en la cama.
— _____ (TN).
Riker, era Riker quien llamaba a _____ (TN).
— ¿Mi hermano está dormido?
No escuché contestación de parte de _____ (TN).
—Te llevaré a casa.
Sentí la cama hundirse aún más y luego fue liberada de un gran peso. Abrí un poco los ojos y solo pude ver un mechón rubio saliendo por la puerta y la punta de los zapatos negros de _____ (TN). Luego todo fue oscuridad y una ráfaga de viento entró por la ventana; se levantaron las pesadas cortinas y pude ver la luna llena. Quedé cegado y volví a tumbarme en la cama sin ninguna fuerza como para levantarme y buscar a ______ (TN).
Los pesados párpados cubrieron mi vista como una tapia de cemento.


*          *         *


Me levanté como a las 6:30 a.m. Sufrí un choque de jaqueca y todos los recuerdos de la noche anterior se atropellaron en mi mente. Todos se sentían igual de importantes y querían que los atendiera todos a la vez. ____ (TN). Riker. La fiesta. El alcohol. ¡_____ (TN)!
Puse los pies en el piso fresco. Y aunque no estaba frío, corrí a buscar mis zapatos. Pasé al baño y me lavé los dientes. Iba a ver a mi chica: tenía que estar presentable. Me miré al espejo, me erguí, verifiqué que no hubiera manchas en mi suéter y lo planché con las manos. Le dediqué una sonrisa especial a mi reflejo y salí de casa.
Al salir de casa noté que Santa había visitado la casa anoche. A lo mejor vino a tomar guaro con nosotros en la fiesta de anoche, me reí para mis adentros. ¿Quién habrá comprado el arbolito de Navidad?
Salí de casa y a los pocos minutos de caminata ya estaba en casa de _____ (TN). El sol despuntó por el este y comenzó a calentar la mañana. Me colé en el porche de su casa y comencé a pensar por dónde entraría.
La puerta principal estaba cerrada. Las ventanas estaban cerradas y con barrotes. Tal vez el balcón del segundo piso… ¿estarían sus padres ahí? De pronto me imaginé la escena si yo apareciera en la habitación de mis suegros y ellos estuvieran haciendo lo suyo… Eso sería súper incómodo.
Oí el traquetear del hierro. Me entró un culillo y salí corriendo de ahí lo más rápido que pude. Me escondí detrás de unos arbustos del otro lado de la calle y desde ahí pude ver que el padre de _____ (TN) había abierto la puerta principal de la casa y salía a ver el jardín. Esa era mi oportunidad.
Moví unas hojas del arbusto accidentalmente y llamé la atención del señor _______ (TA), pero luego él volvió a concentrarse en lo suyo. Una suerte.
Salí de mi escondite sin hacer un solo ruido y crucé la calle lo más rápido que pude. Entonces el hombre se paró; me congelé en medio de la calle. Piensa en qué le vas a decir si te ve… ¿Y si tan solo le dices que quieres ir a cogerte a su hija? NO. Mejor dile que quieres ir a verla y mirarla dormir. Eso suena mucho más romántico y que te importa su hija.
El hombre se giró en dirección al patio, más bien parecía que iba a bajar al río. ¡Eso era justamente lo que estaba haciendo! Oh, Dios Santo, ¡qué suerte tan grande!
Me descongelé y entré a vuelo de halcón dentro de la casa. El tiempo fue tan gentil conmigo que me permitió estar con ______ (TN) en instantes tan cortos. Y entonces yo la tenía ahí: en su cama, rodeada de un montón de cómodas almohadas y abrazando un peluche que más parecía almohada… Sí, era una almohada con forma de peluche. Su cabello le cubría la cara, pero su nariz sobresalía. Su respiración era lenta y el calor y la comodidad de la habitación me hizo casi rendirme ante la tentación de deslizarme junto a ella. Ese lecho se veía tan cómodo, calientito y suave…
Estiré mi mano, separé los dedos y a paso de caracol los dejé descender sobre su cabeza. La textura de su cabello me hizo recordar lo que sucedió en la fiesta de anoche. Ella estaba tan cansada y a lo mejor estaría engomada cuando despertase.
Su boca se abrió en un bostezo y posteriormente sus ojazos se abrieron de par en par…

— ¿Rocky?

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BOOM!!!!!
Un nuevo capítulo y en con dedicatoria para Ross <3
Mañana es el cumple de Ross!!💝💋
Y como regalo de Navidad:


Feliz Navidad y próspero 2017

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