Capítulo 25: "Bye plastie"

Capítulo 25:

Me duché, me vestí y salí ya lista. Rydel y María increíblemente seguían ahí.

-       Ya estoy lista.- afirmé

-       Oh, te esperan en el comedor.- me indicó Rydel.

-       ¿Y a ustedes no? ¿Ya desayunaron?-les interrogué.

-       No.- dijo María.

-       Y… ¿No creen que sería una fantástica idea si me acompañan a desayunar?

-       Es cierto.- Dice Rydel.

-       ¿Entonces…?

-       Vamos.- Salieron de mi habitación más rápido de lo que creí que saldrían por lo lento que se decidían.

Bajamos las tres juntas como buenas amigas que somos. Los chicos estaban desayunando en una enorme mesa en el centro de una enorme –y debo decir, muy hermosa- habitación. El mayordomo –no sabía que teníamos- entró al comedor por una pequeña puerta que, supongo, conecta con la cocina.

-          Señorita – se dirigió a mí- siéntese junto al joven de cabello castaño-marrón.- se refería a Rocky.

Y efectivamente, había un puesto vacío junto a él. También había ya un plato servido de lo que el resto comía. No tengo ni idea de lo que era, pero lo comí.

-          ¿Cómo dormiste anoche?-me preguntó Rocky intentando entablar conversación conmigo.

-          Bien, gracias. –solo eso dije.

-          ¿Para qué tanta sofisticación?- dije viendo las vajillas tan finas.

-          No tengo idea, mejor pregúntale a mi mamá.-me respondió.

-          Lo haré.

-          Y ahí viene la oportunidad perfecta.

-          ¿Eh?

Alguien había interrumpido nuestra conversación, era Ross, quién más sino Ross. Me volteé y le vi. Inexplicablemente lo primer que vi cuando volteé fueron sus labios haciendo todavía la mueca de la terminación de la palabra “opportunity”. Luego escuché unas voces en inglés que estaban discutiendo. Las reconocí a los pocos segundos de estar escuchando: eran Mark y Stormie. ¿Discutiendo? Eso no suena para nada bien.

-          Tranquila, nadie te va a matar.-me dijo Riker. Le mire y él me devolvió la mirada.

-          ¿Matar? ¿Por qué lo dices?

-          Tu rostro

-          ¿Qué? ¿Qué tengo? ¿Qué le sucede a mi cara?- pregunté asustada.

-          Pues que estás pálida.- respondió Rydel. Realmente nunca me doy cuenta de cuánta gente hay a mi alrededor hasta que hablo con todos a la vez.

-          ¿Yo? ¿Pálida? ¿Por qué?

-          ¿Y nosotros qué vamos a saber?- comentó Ross en tono de pregunta.

-          Ni idea.

Mark y Stormie entraron al comedor. Anteriormente sólo había oído su “discusión”, pero luego viles discutiendo. Apenas nos vieron a mí y a los demás, ambos simularon que nada sucedía. Sólo sonrieron, dijeron “Buenos días”, se sirvieron el desayuno y simplemente conversaron normalmente; tratando de mostrarse lo más hospitalarios posibles. No sé el resto, pero yo me sentí bastante incómoda en esa situación. Opté por simplemente esperar a que pasara.

Yo ya había terminado de comer -lo que sea que haya tenido en el plato aquella vez- y, por respeto, quise esperar a que alguien se levantara, indicándome podía levantarme también. Después de largo rato, noté que no era la única esperando la señal para levantarse de la mesa: María, Juan y Rydel estaban esperando también. Como que nos pusimos de acuerdo y nos levantamos todos a la vez.

Mi primera idea fue ir a mi habitación. Eso hice. Llegando a mi puerta, se acercaron Rydel y María. Me asusté un poco al principio, pero luego, normal, son mi mejor amiga y una amiga, hermana del chico que me gusta y tecladista de R5, ¿qué mal puede haber estas estas dos?

-          ____ (TN)- dice Rydel.

-          ¿Qué sucede?

-          Podemos entrar a tu habitación.- pidió María.

-          Claro.- asentí.

Ambas entraron a mi habitación.

-       ¡Woah, qué linda habitación te dieron! No como la mía.- dijo Rydel.

-       Pero, tú ya estuviste aquí, no la viste.

-       No- me respondió.

-       Okay, distraídas, díganme ya de una sola vez ¿Qué rayos hacen aquí?

-       ¿Nos dejas ver el vestido especial que compraron ayer?

-       ¿Cuál vestido especial?- no tenía ni idea de qué hablaban.

-       ¡AHH! Yo lo busco- reacciona María. Busca violentamente en mi 

guardarropa. Después de varios segundos angustiosos (yo quería saber de qué diablos hablaban, ¿acaso tengo una bomba en mi habitación o qué? Y Rydel, no tengo idea de porqué estaba angustiada), sacó un vestido hermosísimo que –ya recordé- habíamos comprado el día anterior. Era así: http://img.chicade15.com/wp-content/uploads/2009/03/ad6564.jpg bueno, nos costó mucho en realidad.

-          ¡Ah…! Te referías a ese vestido hermoso del cual me enamoré como 12 horas después de que lo compré.

-          Sí, nos referíamos a ese.

-          Okay. ¿Y para qué lo querían?-interrogué vehementemente.

-          Nada.- dijo María.

 Ambas salieron, con el vestido, de mi habitación. Muy extraño su comportamiento. Noté, además, Rydel iba como reclamándole algo a ella, algo relacionado con su actuación. >> ¿“Actuación”?<< me sigo preguntando ¿qué significará aquello?

Recordé que iba a salir con los Lynch a visitar al ciudad (otra vez:). En realidad recordé eso porque Rocky entró a mi habitación. Yo estaba leyendo un e-mail que me había enviado Ana (mi otra amiga, ¿La recuerdan?... http://r5ytutuhistoria.blogspot.com/2014/06/capitulo-10-7-meses-sin-rocky-y-al.html). Bueno, como sea. Ana me estaba preguntando si sabía algo de la tarea de arte. >> ¿La tarea de arte?

¿De qué tarea hablas?

Le escribí en un texto que recién habíale enviado. Seguido a esto, sentí una mano fría, se sentía como la mano de un reptil. Mi primera impresión fue: “Dios mío, la niña del aro ha salido de mi teléfono y no me di cuenta”. Me preparé para gritar al voltear (para ver un escalofriante rostro azul-verdoso el cual me mataría tan solo con la expresión en su rostro).

Me giré, sí, eso hice… sin miedo… fue un solo movimiento rápido. No quise mirar. Cerré los ojos y grité “¡AHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHH!”

No vi nada. La siguiente acción que efectué fue tirarme a la cama y gritar para que la niña no me llevara consigo y me encerase en su pozo en donde la encerró su madre desgraciada >>”Maldita”<<.

-       ¿Puedes parar de gritar como loca?- era la voz hermosa de Rocky.

Quien (supuse) estaba al lado de la cama. Levanté lentamente la cabeza de la almohada. Sí, era él. Me miraba con una cara como de“¿Soy yo o las chicas están muy raras hoy? ¿Será la nueva colonia que estoy usando lo que las vuelve locas?”

-       ¿No me vas a matar?-pregunté como una niñita que tiene miedo al monstruo que vive debajo de su cama.

-       No, claro que no.- se sentó en mi cama.- ¿Quién crees que soy? ¿Riker?- reímos; aunque no me gustó mucho la broma.

-       No me vuelvas a asustar así.- le dije firmemente.

Rocky se quedó con cara de WTF.

Me senté a lado de Rocky, en mi cama. Rocky se quedó mirándome durante un largo rato. Me miraba como examinando cada centímetro2 de mi cuerpo. Me daba miedo esta mirada suya; no era una mirada una mirada pervertida. Era una mirada muy normal, me miraba de la misma forma en que mira a su plato de espagueti –pensándolo bien, eso no suena perfectamente bien-. El punto es que, la forma en que me miraba no era lo que me daba miedo, sino… no lo sé, tal vez el hecho de que analizara cada cm2 de mi cuerpo y sin esa mirada pervertida que le caracterizaba.

-          ¿No tenemos que ir con los demás?-le pregunté en un momento en que sus ojos se posaron sobre los míos y se mantuvieron ahí.

 Él me miraba con unos ojos como suplicando perdón >>”Perdón por qué”<<. Realmente yo no entendía la situación.

-          ________ (Tu apodo), sabes que Ana te estuvo llamando toda la mañana –interrumpió María.- Okay, enamorados, creo, ____- (TN), que tienes que resolver algo primero antes de ir con Rocky -a dónde sea que quiera “ir"-.

Volteé a verla. Ahí estaba mi mejor amiga con cara de “¿y yo?”. Sostenía su teléfono en una mano y con la otra se apoyaba en la pared para quedar en una posición algo sexy –diría yo-. Lástima que a nadie en la habitación, en ese momento le interesara lo sexy que –probablemente- se veía.

-          Lo siento. ¿Qué me decías?-me levanté de la cama y comencé a caminar en dirección a ella, para no tener que gritar.

-          Ana estuvo llamándote durante 10 minutos y no le contestaste.-contestó María.

-          ¿Y…?- dije blandiendo las manos- ella tiene una enorme computadora, una laptop, una Tablet y un teléfono Android, ella puede investigar su tarea.

-          Si ni siquiera sabe cuáles son los parámetros que dejó la profesora.- expresó María.

-          Pues ¡qué mala suerte! Porque yo estoy peor que ella: ni sabía que había tarea de arte hasta que ella me envió un mensaje hace 10 minutos.

-          Oh. Pues, no es cierto. Tú ya hiciste la tarea, la hiciste antes de  venir.- repuso María.

-          ¿Cuándo?- interrogué- más bien, ¿cuál era la tarea?

-          El documental sobre los principales problemas de la de ciudad de __________ (Tu ciudad).-me explicó María.

-          Emrr… creo que yo ya estoy de más aquí.-dice Rocky mientras camina hacía la puerta.

-          ¡Ah….! Ya, sí tienes razón, yo ya hice la tarea. Ahora solo tengo que decírselo a Ana.

-          Claro, yo siempre tengo razón.-ostentó ella.

-          Me estoy acercando a la puerta, estoy por cruzar el umbral de la puerta, me largaré de aquí. No volveré.

-          Sí, mejor ya lárgate-le dice María a Rocky.

Tomé mi teléfono y escribí rápidamente el mensaje para Ana:

Ya sé. Tienes la fortuna de estar en mi grupo de trabajo y que yo ya lo hice. Te mando el video para que lo edites entre hoy y mañana. Ahora mismo estoy de salida. Cuando regrese aquí, al hotel, te lo envío.

Envié el mensaje.

-          Okay. Estoy a punto de poner un pie fuera de tu habitación, _____ (TN)…

-          Oh, Rocky.-le llamé.

-          Sí- entró a mi habitación, y como que voló hacia mi lado.

-          Cuando salgas le dices a Rydel que iré dentro de 5 minutos.

Rocky puso cara de burro igual que el botones el día anterior cuando Rydel, María y yo estábamos haciendo relajo afuera del hotel a las 10: 00 p. m.

Yo ya había hablado, no quedaba nada más que hacer que obedecer: Rocky salió de mi habitación y segundos después pude oír cuando llamó a Rydel.

-          Listo, ya envié el mensaje. ¿Algo más que me tengas que recordarme?-dije dirigiéndome hacia María.

-          Emmmrr… tu yeso.-dijo María.

-          Oh, por Dios, tienes razón, mi yeso. No he cuidado mi brazo.

Ni me acordaba del yeso. En realidad sí lo tenía puesto, obviamente no me lo podía quitar, pero el cabestrillo sí me lo había quitado.

Rápidamente busqué mi bolso, el que había usado el sábado, el día del concierto (ya conocen la historia). Busqué dentro de él y encontré lo que buscaba: el papel de la enfermera. Según éste podía ir a quitarme el yeso ese mismo día (lunes) o esperar al siguiente (martes).

-          ¿Voy hoy a retirarme le yeso o esperamos a mañana?

-          Mmm… ¡hoy! Definitivamente hoy.

-          Ok. Tenemos que ir con Madeleine sino no me atienden.

-          Vamos a buscarla.

Tomé rápidamente mi bolso, le metí un poco de cosas en desorden, pero estaba segura de que tenía todo lo necesario. Sí: celular, dinero, el papel de la enfermera, un espejo, mi cédula, el pasaporte, etc.  Y fui con María en dirección a la sala.

En la sala estaban ya Riker, Rocky, Ross, Ryland, Rydel, Ellington y Mark. Clásica, alguien falta: mi hermano. 

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hello <3 

ha pasado más de una semana del cap anterior. para que sepan: no tenía tiempo porque iba a ir al cine a ver el pre-estreno de la peli "Invación".

¡qué cosa! tantos españoles en España y un gringo es el que tiene que dar el reportaje sobre el asunto de Cataluña para CNN en español!

Los gringos dan risa cuando hablan español, xd

bueno, a lo que iba

lamento mucho lo que voy a decir, bueno, escribir:

es muy probable, posiblemente que esta sea mi última entrada del año.

NOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO

mañana entregan los boletines...

¡UUUUUUUUUHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHH!

... y la nota no es muy buena. es probable que me prohiban usar la compu por lo que resta del año o al menos hasta después de los exámenes, o sea, hasta el 9 de diciembre. 

es algo que está realmente fuera de mi alcance. realmente la mecanografía es una materia díficil; aunque no tiene sentido: porque ahora mismo escribo utilizando los diez dedos, con el teclado guía, los alcances que dice el libro, y tengo bastante velocidad. ahora , porque se me olvidó el maldito sobre, entonces a la doña se le ocurrió la brillante idea de ponerme 1.0 y ese maldito 1.0 me jodió el promedio.

pero para que no se queden tristes:

sin importar que tan pésimo esté el día, la vida de uno, o sin importar que tanto hiedan nuestras vidas siempre hay que estar:  HAPPY

y algo de R5:

con eso me depido. 

hasta el 9 de diciembre, probablemente.